Este post, o algunos otros, puede parecer un tanto estúpido, ya que vamos a hablar de las ventajas de ir el primero en una carrera. Parecen ovbias, pero quizás no os habíais parado a pensar en las ventajas de liderar una carrera, así que las comentaremos, y pasaremos algo de tiempo en las desventajas, que también las hay. Incluso las cosas que a priori son positivas, pueden esconder factores menos favorables.
También hemos de reconocer que, depende de las circunstancias y del contexto, lo que puede parecer positivo puede volverse en nuestra contra, y al contrario, por eso, como casie siempre, lo importante es adaptarse de la mejor manera a los factores que nos rodeen y aprovecharlos a nuestro favor. Suena sencillo, pero no lo es tanto, así que sabéis desenvolveros en cualquier situación, tenéis mucho ganado.
No vamos a decir que ir primero en una carrera implica muchas cosas negativas, pero alguna hay. Puede que no os hayáis parado a pensar sobre ello, pero vamos primero con las positivas, que son abundantes. Obviamente si vas primero, tus posibilidades de ganar cuando cruces la línea de meta son altas. Aunque tampoco es una garantía. Ponemos un ejemplo claro donde salir e ir primero es clave, el GP de Mónaco de Fórmula 1 es un claro ejemplo de pocas opciones de adelantamiento, por lo que si sales primero o vas primero en carrera, las posibilidades de ganar la carrera son muy altas, quizás en el circuito que más altas pueden ser. En cambio hay otros sitios donde adelantar es francamente sencillo, con ayuda de rebufos o por las características del circuito, e ir delante puede que no sea lo que todos ansían. Se me ocurre cualquier carrera de motos, donde los que van detrás suelen tener ventaja e estudian al primero, donde pasarlo y como mejorar su vuelta, y le acaban dando el hachazo al final de la carrera, dejándole con la miel en los labios y sin victoria.
Otra clave de ir primero, y según donde sea la carrera, puedes ser el amo y señor del ritmo. Incluso puedes ir lo suficientemente lento para evitar dañar tus neumáticos y ser quien manda, cuando se hacen las paradas en boxes, o cuando apretar el acelerador, o cuando ralentizar. Carlos Sainz en Singapur 2023 y Charles Leclerc en Mónaco 2024 pueden darnos un máster en ello. Hicieron lo que les placía, y ganaros sus carreras de manera aparentemente sencilla. Seguro que no fue tan fácil como se vió por televisión, pero el resto de pilotos y equipos, siguieron lo que ellos marcaron.
Punto capital este, la visibilidad es la mejor de todas, tanto si llueve como si no. Nadie va delante para salpicarte, taparte visión, o frenarte justo delante tuya. Eso es todo un lujo en las carreras, donde los demás influyen, y mucho, en todo lo que tenemos que hacer nosotros durante una carrera. Nos hacen cambiar nuestras trazadas, nos hacen frenar más tarde o más temprano, no nos dejan ver los vértices de las curvas, el agua que levantan otros competidores nos viene directa a nosotros, si alguien se accidenta delante nuestra puede hacernos incluso salirnos de pista o chocarnos contra él... ¿hace falta que siga? Creo que no, rodar en cabeza es un auténtico privilegio, y evitas cualquier tipo de sorpresa en tu lucha contra el reloj y contra el afán de cruzar la línea de meta antes que nadie.
Ya lo comentábamos indirectamente en el párrafo anterior, pero los riesgos se minimizan cuando lideras una carrera. Nos referimos a tener un porcentaje mínimo de posibilidades de colisiones contra otros competidores. Ponemos como ejemplo cualquier carrera, cuando salen de parrila, si hay incidentes, suelen ocurrir en la zona media o trasera de la clasificación, y lo que suele ocurrir es que el primero siempre suele hacer hueco en apenas media vuelta, mientras muchos otros se han salido o chocado entre ellos. Saliendo primero, lo habitual es evitar el caos y "volar" para preparar tus cartas para poder optar a la victoria. Creo que no hace falta poner ejemplos, ya que esto ocurre en al menos el 80 % de las carreras.
Y algo que no todo el mundo se da cuenta, pero la motivación que te da ir primero no es comparable a muchas otras motivaciones. Nos referimos a que si ya vas primero, tu nivel de confianza sube y esto se convierte en un gran impulso psicológico. Los niveles de adrenalina suelen mantenerse, y nos focalizamos para mantener el ritmo, la ventaja, e ir descontando vueltas hasta llegar al final del desafío.
Lo que vamos a recordar ahora, también lo hemos comentado indirectamente anteriormente, yendo primero, nosotros elegimos nuestra trazada, y no tenemos que adaptarnos a coger la que podamos o la que nos dejen los rivales. Cuando hay luchas cercanas, lo habitual es que un contrincante pueda ser capaz de coger la trazada buena, pero el otro u otros suele verse obligado a abandonarla e irse por la "zona sucia" o zona más húmeda o peligrosa. La conclusión es que, al perder la trayectoria buena, salimos perdiendo sí o sí. Ya sea en posiciones de carrera, en riesgo de irnos fuera de pista o tener un accidente, o, en definitiva, en ventaja sobre el rival. Yendo primero, trazamos correctamente y no tenemos que preocuparnos de controlar el coche, mantener el agarre, o que nos adelanten, entre otras cosas.
En términos de estrategia de carrera, yendo por delante tenemos la "pole". Nos referimos a que podemos ver que hacen los demás, por ejemplo si entran a cambiar ruedan antes que nosotros, y podemos responder en la vuelta siguiente sin ninguna consecuencia, habitualmente hablando claro. También podemos decidir qué estrategia es la mejor para nosotros teniendo ventaja sobre los demás, o incluso entrar a hacer nuestra parada antes que los demás, dejándo a nuestros rivales sin margen de maniobra para lanzarnos un ataque en boxes. Vamos primeros, y llevamos la inciativa sobre la pista y también fuera de ella.
Con todas estas ventajas que hemos ennumerado, y con todo lo que nos gusta ganar a todos, aunque algunos digan que lo importante es sólo participar, ir primero es lo que todos quieren. La posición soñada para poder ganar una carrera, y por la que todos luchan en cuanquier momento. Es la posición de más privilegio, para poder batir a tus competidores, que es por lo que todos luchan en las carreras, y en muchas ocasiones, en la vida.
Pero, como hemos advertido al principio, no son todo ventajas lo de liderar una carrera, y aunque no os lo creais, también hay implicaciones no tan bonitas. El nivel de estrés puede que no sea soportado por todos los que llegan a liderar una carrera, y hay muchos ejemplos de lo que solemos conocer como: "le ha podido la presión" y el líder comete un error y sufre un accidente o salida de pista. Como hemos comentado, los rivales son feroces y lo dan todo por presionar al líder y arrebatarle su tan ansiada posición, y hay veces que este juego tanto físico como psicológico hace mella en el líder.
No debemos olvidarnos de los recursos y energía necesarios para ser el líder, que generalmente son necesarios más que para los rivales. Os preguntaréis porqué, ¿verdad? Bueno los rivales pueden usar los rebufos para adelantar y tomar cierta ventaja, y el líder no puede. También los neumáticos pueden sufrir más ya que tanto el aire a atravesar y la pista suelen ser obstáculos más complejos para el líder, que va "sólo ante" el peligro, y los demás pueden aprovecharse de menor resistencia del aire y mejor agarre. Conclusión, hay que ser mejor que los demás a pesar de tener algunas desventajas. Éstas, bien gestionadas, pueden superarse de la mejor manera y llegar a meta antes que los demás. De no ser así, la victoria será para otro. Y vosotros, ¿queréis ir primeros o preferís evitarlo? Respuesta compleja...pero depende de las circunstancias.
Adrián Osés, Locos del Motor
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