Como suele ser habitual en prácticamente todos los modelos de vehículos que nos rodean, las marcas realizan un «lavado de cara» del modelo para estirar un par de años su vida en el mercado. Unos cuantos cambios con poco impacto en la producción pero normalmente con buen punto de inflexión en las ventas.
Es una gran estrategia desde el punto de vista de marketing, ya que se suele anunciar como «nuevo vehículo» cuando en realidad los cambios suelen ser mínimos y casi siempre en los mismos lugares. Por fuera tanto ópticas delanteras como traseras suelen tener nuevas formas o componentes. Por dentro, suelen llegar actualizaciones tecnológicas o de diseño en el salpicadero. Los cambios son muy asumibles en las fábricas de producción y en los proveedores, pero de cara al gran público parece que la marca hace un gran esfuerzo creando otro nuevo vehículo.
La palabra re-styling es la que se utiliza para describir estos cambios, aunque no suele salir fuera de las fábricas de producción de automóviles o concesionarios. Como clientes, es muy llamativo escuchar y ver que tu marca referente ha sacado al mercado un pedazo de vehículo que supera al anterior y lo que es más importante, al que tú posees. Otros clientes que ansían tener un vehículo nuevo también se interesan por ese nuevo lanzamiento. Conclusión, la demanda sube y la marca estira la vida de su modelo por al menos otros 2 años más antes de realmente lanzar un nuevo modelo al mercado.
La vida de los modelos de vehículos en el mercado suele ser de unos 7 años, y el re-styling suele llegar tras 4 o 5 años desde el lanzamiento oficial del coche. El tiempo pasa muy rápido y al final 4 o 5 años no es mucho tiempo entre las presentaciones de nuevas creaciones. Incluso este tiempo parece muchísimo menos ya que las marcas cada vez presentan más modelos y el cliente tiene la sensación de que siempre están creando y satisfaciendo nuestras necesidades. Cuantos más modelos sacan al mercado, es más complicado darse cuenta de que tu modelo de vehículo va cumpliendo años, y siempre es buena ocasión para hacerte con uno nuevo ya que nos bombardean con nuevas opciones para ocupar nuestro garage.
Para que os quede cristalino de que hablamos, os enseñamos el Range Rover 22MY, un re-styling que hace al buque insignia de la marca todavía más atractivo y moderno, aunque si os fijáis bien el estilo continúa muy presente y seguro la demanda sube de nuevo.
Hay que decir que otra cosa no, pero bonito es un rato y variantes no le faltan para poder cubrir todas las peticiones que pueda haber. Distintas motorizaciones primando la evolución hacia la electricidad como motor, y distintos niveles de prestaciones y acabados para que puedas tener tu Range Rover sin que nadie tenga uno como el tuyo. Tan sólo es necesario tener buen colchón económico y asegurarte de que nadie ha elegido tus opciones para tu vehículo ideal.
Adrián Osés, Locos del Motor
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