La gran mayoría de gente sabría responder a la pregunta de: ¿de donde venimos? Parece obvio que sabemos y normalmente nos acordamos de los acontecimientos o hechos pasados. También parece obvia la respueta a la pregunta: ¿donde estamos? Con tan sólo fijarse en el momento actual podemos articular una respuesta coherente. Sin embargo, ante las preguntas de futuro la cosa cambia.
La pregunta pertinente sería: ¿hacia donde vamos? y ahí las dudas pueden asaltarnos ya que la incertidumbre del futuro siempre nos acompaña. Esto ocurre en cualquier ámbito que os podáis imaginar, y por supuesto también en el mundo de los automóviles y la movilidad de personas. Para muchos, la respuesta sería que vamos hacia el vehículo eléctrico, para otros puede ser que seguiremos mejorando los vehículos de combustión interna ya que la apuesta eléctrica no triunfará. Los híbridos pueden ser otra opción, aunque eésta parece ser de transición dadas las restricciones a los mismos que se preveen. También podría haber algún otro tipo de solución todavía por descubrir. O incluso otras alternativas como el hidrógeno, el agua u otros combustibles creados por el ser humano puedan ser la respuesta que el mundo del automóvil está buscando.
Lo que está claro es que quien acierte con su respuesta de evolución, va a marcar un hito histórico en el mundo de la movilidad, y todos los fabricantes, más tarde o más temprano, entrarán en la rueda de futuro para competir con el resto de marcas (las existentes y las que vayan surgiendo) con el objetivo de dar a sus clientes lo que necesitan para desplazarse en los próximos años.
Muchas empresas y fabricantes de automóviles están invirtiendo recursos en muchos casos ilimitados para desarrollar nuevos sistemas y apostar por encontrar el camino hacia la cima. Por ejemplo, Obrist, es una empresa que lleva 10 años trabajando en combinar las mayores ventajas de las formas de energía que ya conocemos, para construir un concepto diferente que incluso puede considerarse con emisiones negativas. No es que su sumatorio de emisiones sea nulo, sino que incluso al utilizarlo podemos estar haciendo un favor a nuestra tan querida naturaleza. La explicación ingenieril del siguiente vídeo es de gran nivel, así que lo mejor es disfrutar de la documentación gráfica y después sacar vuestras propias conclusiones:
Para nosotros, surgen dudas como porque sólo ellos están trabajando en ello (que sepamos), o ciertas sorpresas como que utilicen a Tesla como base de pruebas (explica porqué en el vídeo). Parece claro que el tema eléctrico se está complicando por momentos debido al gran aumento de precios y de demanda, por lo que quizás las opciones de hidrógeno o el plan de Obrist pueda ser la respuesta que todo el mundo está esperando para los próximos años.
Para otro día hacemos un cambio en la pregunta de futuro y le damos una vuelta de tuerca. Quizás no deberíamos preguntarnos hacia donde vamos sino hacia donde queremos / debemos ir. Con la foto global, los que mandan deberían marcar el camino a seguir para conseguir que todos salgamos beneficiados, sobre todo nuestro planeta y sus recursos, pero eso da para otro artículo.
Adrián Osés, Locos del Motor
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