La madera suele ser un material que apenas se usa en producción de automóviles. Normalmente son las marcas de lujo las que la utilizan para diferenciarse del resto de marcas con detalles en el interior de los vehículos más caros, como por ejemplo en los paneles de las puertas, alguna zona del salpicadero, o palanca de cambios, entre otros detalles.
Podemos decir que cuando se usa, la madera supone menos del 1 % del total de los materiales utilizados en la manufactura del vehículo. Es p´racticamente nada, aunque hoy os vamos a enseñar un caso donde la madera es clave. Aproximadamente el 90 % de este vehículo tiene la madera como materia prima. Se trata de un proyecto muy curioso, de nombre Splinter.
La apariencia del Splinter es muy atractiva ya que luce como un superdeportivo de aktas prestaciones. El creador de la idea eleigió la madera como materia prima principal ya que es el único material realmente y naturalmente biodegradable y renovable. Además, su producción requiere una cantidad de energía muy pequeña si la comparamos con otros materiales.
Joe Harmon, como no de Estados Unidos, concretamente de Carolina del Norte, es el creador y diseñador de esta idea llevada a la realidad. Nada más y nada menos que 9 años trabajando en el Splinter con la ayuda de su equipo. 
¿No está nada mal para ser un proyecto tan elegante eh? Lo curioso es que el proyecto empezó como un proyecto de postgrado en la Universidad Estatal de Carolina del Norte y ha seguido a lo largo de los años hasta ser un Splinter completo y que funciona gracias a tener todas las partes posibles creadas a partir de madera.
Joe, el creador, advierte que la madera tiene una mejor relación resistencia/peso que el acero y el aluminio, entre otros, por lo que la madera debería ser una fuente importante para estructuras de cualquier tipo, vehículos entre ellas. La realidad es que construir en madera no es viable, ya estamos aumentando a marchas forzadas el consumo de cartón al intentar defenestrar el plástico, y la madera no se crea de un día para otro. Como idea, sus combinaciones de maderas le han dado para crear un gran vehículo, pero ha necesitado 9 años y el Splinter ni es cómodo ni es práctico. Eso sí su exploración de nuevas ideas y percepciones de la madera ha sido más que profunda.
Nos gusta el Splinter y nos gusta el proyecto, pero tan sólo como algo curioso, nunca desde el punto de vista de la ingeniería del automóvil.
Adrián Osés, Locos del Motor.
SOPORTE ON LINE 
