El título de nuestro post suena a imposible, pero no es así. Hoy os vamos a enseñar una limusina cuya movilidad la genera agua marina. No es una película de ciencia ficción ni estamos de broma.
Se llama "Quant", es una limusina deportiva y no utiliza ningún tipo de combustible, ¡sí, ningún combustible! Esto supone que uno de los gastos más importantes de un vehículo queda eliminado por completo, y además no se contamina cada vez que se enciende el propulsor.
Funciona con agua como decíamos, fuente inagotable en nuestro planeta, por lo que de primeras pinta perfecto. Utiliza la electrólisis para conseguir alimentar sus baterías haciendo que los iones del agua marina reaccionen y se almacenen para garantizar potencia y autonomía. 4 baterías, una por cada rueda, aseguran energía constante y permanente.
Capaz de recorrer de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, y con números (al menos teóricos) de autonomía francamente buenos superando a los actuales eléctricos del mercado. Un total de 600 kilómetros continuos de energía que no están nada mal. Similar a la autonomía de muchos vehículos con motores de gasolina.
La velocidad punta también es alucinante, aunque a buen seguro que de ser alcanzada, la autonomía baja tan rápido como el depósito de gasolina de los supercoches actuales a esa velocidad. 350 km/h para deleite del conductor y ocupantes (o quizás no).
Como no podía ser de otra manera, la conectividad es un "must" en los vehículos de nueva generación, y el Quant puede ser manejado mediante el teléfono móvil mediante su propia aplicación. Prácticamente cualquier cosa del interior del coche puede ser objeto de manejo/ajuste desde el móvil. Interesante aunque quizás demasiadas cosas para el usuario.
Se llama "Quant", es una limusina deportiva y no utiliza ningún tipo de combustible, ¡sí, ningún combustible! Esto supone que uno de los gastos más importantes de un vehículo queda eliminado por completo, y además no se contamina cada vez que se enciende el propulsor.
Funciona con agua como decíamos, fuente inagotable en nuestro planeta, por lo que de primeras pinta perfecto. Utiliza la electrólisis para conseguir alimentar sus baterías haciendo que los iones del agua marina reaccionen y se almacenen para garantizar potencia y autonomía. 4 baterías, una por cada rueda, aseguran energía constante y permanente.
Capaz de recorrer de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, y con números (al menos teóricos) de autonomía francamente buenos superando a los actuales eléctricos del mercado. Un total de 600 kilómetros continuos de energía que no están nada mal. Similar a la autonomía de muchos vehículos con motores de gasolina.
La velocidad punta también es alucinante, aunque a buen seguro que de ser alcanzada, la autonomía baja tan rápido como el depósito de gasolina de los supercoches actuales a esa velocidad. 350 km/h para deleite del conductor y ocupantes (o quizás no).
Como no podía ser de otra manera, la conectividad es un "must" en los vehículos de nueva generación, y el Quant puede ser manejado mediante el teléfono móvil mediante su propia aplicación. Prácticamente cualquier cosa del interior del coche puede ser objeto de manejo/ajuste desde el móvil. Interesante aunque quizás demasiadas cosas para el usuario.
SOPORTE ON LINE 
