Jaguar ha revelado su apuesta eléctrica para competir con Tesla, y lo ha presentado en el país de su rival, en el Salón del Automóvil de Los Ángeles. Buena estrategia.
El I-Pace se fabricará en Austria en la planta de Magna Steyr gracias al acuerdo firmado por Jaguar Land Rover para desarrollar vehículos con la firma austriaca y llegará a los clientes en el año 2018 con una autonomía de 500 kilómetros.
Con diseño futurista y concebido para ser exclusivamente un coche eléctrico, Jaguar muestra que no entró a competir en la Fórmula E por casualidad y que el nuevo I-Pace será un gran competidor para el Tesla Model X.
2 motores eléctricos síncronos de imanes permanentes, colocados uno en cada eje, producirán una potencia conjunta de 400 CV y permitiendo al I-Pace alcanzar los 100 km/h en aproximadamente 4 segundos. Además, el par será repartido en las 4 ruedas.
Para lograr esos más de 500 km de autonomía, la batería tiene 90 kWh de capacidad. Su recarga se puede realizar en un enchufe doméstico o mediante un cargador de 50 kW. Jaguar dice que en el segundo caso se recarga el 80% en 90 minutos y el 100 % en algo más de dos horas; no da el tiempo de recarga en un enchufe normal, que según nuestros cálculos sería de un mínimo de 39 horas (en una toma de 230 V y 10 A).
La batería es de iones de litio (gracias a un acuerdo con LG) y tiene un circuito de refrigeración líquida mediante un radiador. El sistema de aire acondicionado puede colaborar en la refrigeración si es necesario. Para calentar el habitáculo hay una bomba de calor en vez de un sistema de resistencias eléctricas, dado que es un método más eficiente.
La carrocería es muy eficiente aerodinámicamente con un coeficiente de 0,29. Las llantas son espectacularmente grandes con 23" y quizás en el I-Pace de producción no lleguen a estar disponibles, aunque en el F-Pace se pueden montar llantas de hasta 22". Lo veremos en 2018.
La suspensión delantera es de paralelogramo deformable (mediante un doble triángulo) y la trasera un sistema de varios brazos que Jaguar llama "Integral Link". Es el mismo esquema que Jaguar utiliza en otros modelos, como el F-Pace.
El nuevo vehículo de Jaguar tiene cinco plazas. En el habitáculo hay dos pantallas, una para la instrumentación y otra para el sistema multimedia, además de un sistema de información proyectada sobre el parabrisas.
Un gran movimiento de futuro que empieza "desde cero" con un modelo nuevo para plantar cara a Tesla. Veremos si lo consiguen.
El I-Pace se fabricará en Austria en la planta de Magna Steyr gracias al acuerdo firmado por Jaguar Land Rover para desarrollar vehículos con la firma austriaca y llegará a los clientes en el año 2018 con una autonomía de 500 kilómetros.
Con diseño futurista y concebido para ser exclusivamente un coche eléctrico, Jaguar muestra que no entró a competir en la Fórmula E por casualidad y que el nuevo I-Pace será un gran competidor para el Tesla Model X.
2 motores eléctricos síncronos de imanes permanentes, colocados uno en cada eje, producirán una potencia conjunta de 400 CV y permitiendo al I-Pace alcanzar los 100 km/h en aproximadamente 4 segundos. Además, el par será repartido en las 4 ruedas.
Para lograr esos más de 500 km de autonomía, la batería tiene 90 kWh de capacidad. Su recarga se puede realizar en un enchufe doméstico o mediante un cargador de 50 kW. Jaguar dice que en el segundo caso se recarga el 80% en 90 minutos y el 100 % en algo más de dos horas; no da el tiempo de recarga en un enchufe normal, que según nuestros cálculos sería de un mínimo de 39 horas (en una toma de 230 V y 10 A).
La batería es de iones de litio (gracias a un acuerdo con LG) y tiene un circuito de refrigeración líquida mediante un radiador. El sistema de aire acondicionado puede colaborar en la refrigeración si es necesario. Para calentar el habitáculo hay una bomba de calor en vez de un sistema de resistencias eléctricas, dado que es un método más eficiente.
La carrocería es muy eficiente aerodinámicamente con un coeficiente de 0,29. Las llantas son espectacularmente grandes con 23" y quizás en el I-Pace de producción no lleguen a estar disponibles, aunque en el F-Pace se pueden montar llantas de hasta 22". Lo veremos en 2018.
La suspensión delantera es de paralelogramo deformable (mediante un doble triángulo) y la trasera un sistema de varios brazos que Jaguar llama "Integral Link". Es el mismo esquema que Jaguar utiliza en otros modelos, como el F-Pace.
El nuevo vehículo de Jaguar tiene cinco plazas. En el habitáculo hay dos pantallas, una para la instrumentación y otra para el sistema multimedia, además de un sistema de información proyectada sobre el parabrisas.
Un gran movimiento de futuro que empieza "desde cero" con un modelo nuevo para plantar cara a Tesla. Veremos si lo consiguen.
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